martes, 12 de junio de 2018

A m a p o l a s

0

"Pirémonos" decía. Que "allá a donde voy arde" mi pecho de poemas, el mismo que se desnuda "del miedo heredado". Entonces las Amapolas eran ensoñaciones y deseos, volaban por el mundo onírico y un cuaderno decorado de dibujos. Y por fin se materializaron.

La Placenta Editorial, después de kilómetros a la espalda, trajo un poemario que se multiplica en cada relectura. SilviOrión comenta que "se lee de una sentada preferiblemente de madrugada" y que recoge "relámpagos eléctricos que salen casi sin darte cuenta pero con la honestidad reflexiva que se mece muy adentro". 

Pero no. No voy a dar la chapa, sus piezas editoriales se defienden por sí solas en cada poema. Mi misión es acercarlos a modo de canapé y ya si quieres el plato completo son 12€ (lo bueno de que no sea un menú es que siempre puedes echar mano a la estantería y volver a él). Hoy compartimos una intervención que hizo en la Surada Poética.



Texto: Saray Pavón
Imagen y audiovisual: SilviOrión


0 críticas :

Publicar un comentario