15/04/2021
Están apareciendo las primeras amapolas. Tendrán una vida breve. Y su existencia será frágil. Apenas sobreviven un minuto si se arrancan de la tierra. Y sin embargo su nombre no deja indiferente. Su belleza etérea nos sobrecoge. Su color nos estimula. Nos da sin tocarnos y no la podemos tocar si queremos que viva. Respetar los límites, ahí está el secreto de toda convivencia.
Texto e imagen de Maite Márquez Martín